HALLOWEEN2010: EL HOMBRE LOBO DE ALLARIZ

Manuel Blanco Romasanta, 42 años de edad, vecino de Allariz (Orense). Oficio: vendedor ambulante, por las aldeas gallegas y portuguesas, además de ayudar a los viajeros a atravesar los montes gallegos en dirección a Asturias, León y Cantabria. Dos de estos viajeros son sus primeras víctimas: una madre y su hija adolescente. Confiadas emprendieron el viaje a Santander desde su aldea natal, en busca de una vida mejor, acompañadas por Romasanta, cuando, en medio de uno de los innumerables bosques gallegos, el amable Manuel sufre una terrible transformación que le lleva a matar, por medio de brutales dentelladas, y a medio devorar a ambas mujeres. Semanas más tarde vuelve al pueblo donde da noticias a los familiares de sus víctimas de lo felices que son ambas en Santander. Con el tiempo va convenciendo a otras mujeres para que emprendan el viaje a Cantabria, con las promesas de una vida más cómoda y próspera. Siete madres con sus niños corrieron la misma suerte que sus vecinas, Romasanta comió sus cuerpos y bebió su sangre, dejando los cadáveres de sus víctimas ocultos en lo más profundo de los bosques. Con el transcurrir de los años y en vista de que no había noticias de ninguno de los emigrantes, tan solo las nuevas que Romasanta contaba, se difunde en el pueblo el rumor de que los viajeros habían sido asesinados, y las sospechas sobre el guía se hicieron certeza cuando unos de los convecinos aseguró haber visto a Romasanta viajando solo cuando debía ir acompañando a una de sus víctimas. Cuando va a ser detenido, Romasanta huye para recalar en un pueblo de Toledo, Nombela, donde es reconocido en el mes de julio de 1852, siendo conducido a la prisión de Allariz donde confiesa, con una calma inusitada, como había asesinado y devorado a doce personas en los bosques gallegos, según él por culpa de una maldición que le hacía convertirse en lobo. Un equipo médico diagnostica, tras hacer al acusado un análisis sicológico, que el individuo está totalmente sano y en sus cabales, por lo que era totalmente consciente de sus actos. Tras un año de juicio, en abril de 1853, Romasanta es condenado a muerte mediante garrote vil, y a indemnizar con 1000 reales por cada una de sus víctimas. Sin embargo un mes antes de su ejecución, un celebre hipnólogo francés, envía un escrito al Ministro de Justicia, alegando que Romasanta estaba afectado de una enfermedad maniaca conocida como licantropía, por lo que no es responsable de sus actos, pidiendo que se le permita hacer un diagnostico e incluso tratar de curar a través de la hipnosis. La apelación llega a la más alta instancia, la reina Isabel, que firma la orden que libra a Romasanta de la pena capital, y se le condena a cadena perpetua. Con el tiempo el HOMILOBO gallego, fue trasladado a la cárcel de Orense donde parece ser que fallece, aunque su final no está nada claro…….. Como no hemos podido ir a Allariz a poner el cache (ya nos hubiese gustado hacerlo), lo hemos puesto en una zona boscosa, “similar” a los emplazamientos donde el hombre lobo cometía sus asesinatos. Tened cuidado al buscar ya que nunca se sabe dónde termina la realidad y empieza la ficción. El cache es de tamaño carrete llevar un bolígrafo para firmar